Siguiendo con el tema del último post, me parece importante explicar porqué el cirujano torácico debe ser la persona que indique o contraindique una cirugía pulmonar, especialmente cuando se trata de evaluar el riesgo de la cirugía. En primer lugar el cirujano torácico quien debe saber la resección pulmonar que necesita un paciente para resecar una determinada lesión. Por ejemplo en una lesión como la de la figura, debe saber con certeza que esa lesión tiene que salir con una cuña o wedge, especialmente porque esta paciente tiene un FEV de 0.8 litros. Debe saber así mismo cuando una lesión por su ubicación necesitará una resección mayor y no será posible resecarla con una cuña. Además podrá evaluar casos especiales, como aquellos pacientes que tienen un nódulo en el lóbulo superior, función pulmonar marginal y enfisema a predominio de lóbulos superiores. En estos casos (que no son poco frecuentes) una resección pulmonar hará las veces de reducción volumétrica y además de tratar el cáncer, se estará mejorando la función pulmonar.
Es verdad que para hacer esta evaluación se necesita cierta experiencia. Sin embargo, es necesario que lo hagamos porque de lo contrario colegas de otras especialidades tomarán el control de los pacientes con cáncer de pulmón en estadío temprano. Y no estaremos hablando de pacientes de alto riesgo que se tratan con SBRT o RFA, sino que a cualquier paciente con un carcinoma Ia se le estarán ofreciendo estos tratamientos mini o no invasivos.
Por esto es importante que nos involucremos en su utilización, hagamos nuestras recomendaciones y nos mantengamos actualizados con las nuevas tecnologías. No existe impedimento alguno para que no podamos realizar RFA. Si no lo hacemos nosotros alguien lo va a hacer… Y de vuelta, nadie mejor que nosotros para evaluar cuándo debe hacerse o cuándo una cirugía resectiva tendrá un mejor resultado para el paciente.
Las nuevas tecnologías están para quedarse, les falta aún estar al nivel de la resección quirúrgica, pero es muy probable que en los próximos años tengamos data cada vez más fuerte sobre la eficacia de estos nuevos métodos.
¿Quién es el encargado de manejar el cáncer pulmonar en sus lugares de trabajo?